Viste cuando decís: ¿Para que vine?... Me quiero ir...
Bueno, eso.
Corría el minuto 14 del primer tiempo y Daniel Vega celebraba su segundo gol con sus hinchas, mientras Centeno la iba a buscar, también por segunda vez al fondo de la red.
Hasta ese momento Platense había sido el claro dominador del partido.
Desde ese momento Platese fue el único equipo de futbol en la cancha.
Muerza de titular donde teóricamente jugaría Quiroz.
Sin Lillo por expulsión eligió a Pacheco, en otra posición donde teóricamente jugaría Quiroz.
Gonzalez por Palacios y Castiarena por Choy González.
Ni bien comenzó el partido se planteó como iba a ser todo el encuentro.
El local encontraba todos los espacios y Almagro parecía que jugaba con un hombre menos.
Superado en todas las líneas y cometiendo errores consecutivos, la pelota se movía entre los de marrón que en menos de 15 minutos metieron dos goles y pudieron ser más.
Tan desesperante era la situación que a los 25 minutos Carlos Mayor decidió sacar a Castiarena y poner a Castano.
Si hubiera un "Ping Pong" de ocasiones de gol podríamos decir que en los 45 iniciales perdimos 18 a 2.
En el segundo tiempo ingresó Ruiz por Muerza, otorgándole algo más de movilidad por el sector izquierdo.
A los 2 y a los 4 minutos Platense se perdió el tercero, tapando Centeno la primera y desviando Vega la segunda ocasión.
A partir de allí Almagro insinuó algo por un lapso de 10 minutos en los que Arce logró desnivelar asociándose con Castano y algo de Sparapani que estuvo llamativamente "apagado".
A partir de los 15 de segundo Platense se vino con todo, llegando con claridad en tres ocasiones.
Almagro con vergüenza salió en busca de un gol, Mayor sacó a Sansotre y puso a Alderete a quien le cometieron un claro penal que Lucas Di Bastiano no cobró a los 31´.
Pasaron 76 minutos desde que sentimos por primera vez ganas de irnos de la cancha y nos preguntábamos para que vinimos, cuando el juez decidió terminar esta pesadilla.
Caminando bajo la lluvia por la colectora de la General Paz, nos fuimos pensando en como transformar en una crónica periodística este partido de terror.
Son 526 minutos que Almagro lleva sin convertir y muchos más en los que no juega bien.
Con Barracas será un partido clave para nuestro futuro.