miércoles, 6 de enero de 2016

CUMPLAMOS FELICES LO MEJOR ESTÁ POR VENIR (por Ture*)

En este nuevo aniversario del nacimiento de nuestro club, quiero invitarlos a pasear un poco por nuestra historia, por nuestras señas particulares.

Señas particulares de un club en el que, por ejemplo, jugó un presidente de la nación, Arturo Frondizi, quien llegó a la tercera Tricolor.

Almagro. Club en el que nacieron futbolísticamente Osvaldo Chiche Sosa, el Beto Yaque, Omar Catalán, Delio Onnis, de posterior paso por Gimnasia y Esgrima La Plata y luego por el fútbol francés (Reims, Tours, Toulón, Mónaco, equipo con el que ganó todo y en el que se cansó de hacer goles).

Almagro. Club en el que se consagró Humberto Recanatini, extraordinario defensor de la Selección Argentina que obtuvo el Sudamericano de Perú en 1927. Recanatini, un mito del fútbol argentino de los años 30, jugó en Almagro desde 1922 hasta 1932, para luego integrar el mejor equipo de Gimnasia y Esgrima La Plata de todos los tiempos, el célebre “Expreso del 33”.

Almagro. Club por el que pasaron –entre muchísimos otros- directores técnicos como  René Pontoni, Juan Guerra, Eduardo Janín, el mismo Chiche Sosa y Elmer Banki, campeón con Almagro en el 71, una leyenda del fútbol de ascenso, dueño de un extraño léxico, mezcla de húngaro rural, italiano del norte y  porteño canyengue , que todos –jugadores, hinchas, dirigentes- comprendían perfecta e insólitamente.

Almagro. Club que fue abrigo y ofrenda para Raimundo Bibiano Orsi “El Mumo”,también conocido como “El Cometa de Amsterdam” ya que se había destacado en los Juegos Olímpicos del 28. Italiano de nacimiento, Orsi había llegado de niño a la Argentina y de sobresaliente paso por Independiente, Boca, Peñarol, Flamengo fue a dar a la Juventus. De la Juventus a la selección Italiana campeona del mundial Francia 34 en cuya semifinal y final Orsi convirtió goles decisivos. Cuando Orsi volvió a la Argentina y jugó en Almagro el campeonato de 1938 y le hizo goles a Boca; El Mumo tocaba el violín en las fiestas barriales y de las otras. Fue un personaje amado y venerado por madres, novias y fanáticos de la redonda.

Almagro. club en donde El Peludo Gigliani, Albino Valentini, El Beto Horvath, Álvaro Fuentes, El Loco Centurión, el impresionante goleador Enrique “Beethoven” Planisi, Julián Armendáriz, Hugo Lizarraga, Panchito Maciel, El Lele Figueroa y tantos más (Diego Figueroa, Luquitas, Tonelotto, la lista sería interminable…)

Almagro. El primer club en obtener un ascenso a Primera en 1937. El primero en acceder a la máxima categoría del fútbol argentino por sistema de Promoción aquella inolvidable tarde del 23 de julio de 2000.
Almagro. Club de tango, murga, milonga y rock ∧ roll. Barrio bautizado así en homenaje a Diego de Almagro, oriundo de Málaga, Andalucía, asesinado por sus “socios” y “amigos” los hermanos Pizarro, a mediados del Siglo XV. Aunque también hay libros que afirman que el nombre del barrio alude a los descendientes del “andaluz” Diego de Almagro. Los propietarios de las extensas quintas y tierras que hoy conocemos como Barrio Almagro: Juan María Almagro, asesor general del Virreinato y Toribio Almagro.

Hoy es el cumpleaños del Club Almagro. Institución con la que se identificó sentimentalmente Alberto Vaccarezza, popular creador de “El conventillo de la Paloma” y cuyos hijos (Eduardo y Enrique, con quien alguna vez tuve el gusto de hablar personalmente) contribuyeron a la donación de los terrenos de la Sede de Medrano. La Mitología Tricolor dice que allí mismo, en Medrano 522, funcionó un conventillo que Vaccarezza tomó como ejemplo para su obra máxima.

Almagro fue el club que apasionó a Luis Elías Sojit, el inventor de las transmisiones deportivas en radio. 
Almagro, club del barrio del gran poeta Mario Jorge de Lellis, de Luis Federico Leloir, de Homero Manzi, del Colegio Nacional Mariano Moreno, de la casa natal de Luis Ángel Firpo “El Toro de las Pampas”, del payador José Betinotti, de Sebastián Piana y del socialista Juan B. Justo.

Almagro. Club del barrio en donde decidió vivir sus últimos años el maestro Osvaldo Pugliese. Barrio en el que Carlos Gardel empezó a cantar por cafetines grasientos, acompañado por el áspero “El Rengo Congo”, encargado de amenazar con el sombrero a los parroquianos que dudaban en colaborar con monedas o viejos billetes Nacionales. De todo eso y más habla el tango Almagro (de Vicente San Lorenzo y Augusto Martini) que desde siempre escuchamos como grito de guerra en los altoparlantes de la voz del estadio.

Almagro. Club del barrio en el que Alfonsina Storni vivió, amó, fue amada y ejerció la docencia, el insomnio, la poesía y el violento oficio de ser mujer en Argentina.

Almagro. Club que tuvo a un presidente de la AFA, Héctor H. Colombo, dirigiendo los destinos de la Asociación del Fútbol Argentino, entre 1956 y 1964, después de haber presidido Almagro por más de dos décadas.

Almagro. Club de Romanito, de Laco, de Mocho, de Justo Gallo, de los Seis Hermanos Adet. Club de los Centoira, de Juan Anselmo Tomaro.

De todo corazón, feliz aniversario para todos.

CUMPLAMOS FELICES EL SUEÑO DE ANHELAR LO MEJOR QUE ES, SIN DUDAS, LO QUE ESTÁ POR VENIR.

CUMPLAMOS FELICES EL ORGULLO DE SER TRICOLORES.

CUMPLAMOS FELICES ESTOS 105 PRIMERO AÑOS. ESTOY SEGURO DE QUE, A PARTIR DE UNA HISTORIA ASÍ,  LO MEJOR QUE TIENE ALMAGRO ES EL FUTURO.


*Ture es editor del libro "Almagro en Parque Chas"